La ocupación hotelera en Tampico-Miramar a lo largo de el mes de julio fue la mejor con un 59% promedio, superando al bastante más de 40% de meses pasados. No obstante, la cifra positiva impone a continuar impulsando el desarrollo de los sitios turísticos y reactivar la vida nocturna pensando en que el visitante tenga más posibilidades de recreación. Ejemplificando, detalló Alberto Ortega Ortega, mandatario de la Agrupación de Hoteles en la parte sur del Estado, la afluencia que se ha registrado en verano de este año deja puntos positivos y consolidan al destino, sin embargo además motiva a laborar en zonas de posibilidad que logren surgir
“Falta más grande vida social, vida nocturna, más sitios a los que logren presentarse los visitantes”, describió el empresario tampiqueño, lo que se deberá hacer en los siguientes meses, los próximos años, con el respaldo de las autoridades de los 3 niveles de regimen y la idea privada. Tampico como destino turístico, contemplando a playa Miramar y Urbe Madero, es el que mejor percepción de estabilidad tiene en el territorio de consenso al último censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); no obstante, hace bastante más de una década gracias a la inseguridad, la vida nocturna decayó y muy lento se ha ido recuperando.
La Sociedad de Hoteles del Sur de Tamaulipas resaltó que, uno de los paseos que tienen la posibilidad de robustecer con el objeto de enfatizar dicha vida nocturna que se busca, es el desarrollo de la laguna ubicada en el interior de la localidad. “Nos falta desarrollar varias regiones, pues hay sitios que tiene un enorme futuro como es todo cerca de la laguna del Carpintero, que serían corredores turísticos con restaurantes, comercios y desarrollo turístico”, afirmó, lo que podría darle vida a el área a lo largo de las noches por medio de establecimientos que se instalen en el futuro. El empresario habló sobre “otro lugar bastante fundamental que es el bulevar Costero de Miramar, el sector pegada al malecón, que es trascendental para realizarse mediante restaurantes, con negocio, artesanías, con cada una de estas cosas que busca el turista una vez que busca un sitio”.
Lo mismo es en la laguna del Chairel, pensando en poder sacarle beneficio al aspecto natural que tiene la conurbación, que está cercada de ríos, lagunas y obviamente tiene costas. Luego de 2 años de nulo turismo por el covid-19, “hemos mantenido un grado de ocupación fundamental y para concluir el mes de julio cerramos con 59%, son números bastante atractivos que reflejan todo el trabajo que se viene haciendo”, afirmó el representante de los empresarios hoteleros. Los meses previos a julio se poseía una ocupación hotelera que en su pico más alto alcanzó el 48%, de esta forma que es una manera de mencionar que se permanecen realizando las cosas bien y que el destino se consolida como punto turístico de fin de semana. “Aumentó la frecuencia de visita, además son los nichos relevantes aparte de la Semana Santa, ahora se preserva la ocupación fundamental todos los objetivos de semana de lo cual va del año, es lo cual hemos trabajado para que no sea un destino estacional”, manifestó.