Del 2015 a la fecha, en el área metropolitana de Tampico han incrementado 50 por ciento los grupos de videovigilancia instalados en varios aspectos, lo que ha creado que más regiones se encuentren vigiladas por las autoridades de estabilidad pública. En marzo de 2015 se inauguró el C4 en el municipio de Tampico, el cual le proveería servicio a toda el sector sur de la entidad con un total de 501 grupos instalados en puntos de vista estratégicos y conflictivos en temas de estabilidad. 6 años más tarde, en el área se poseen distribuidas 750 cámaras de videovigilancia empero no sólo fue el incremento de los conjuntos, además se han renovado o actualizado.
Se colocaron los dispositivos de vigilancia en regiones estratégicas de la conurbación, los cuales pretenden robustecer la estabilidad en zonas consideradas como de problema, así como accesos y salidas de los respectivos municipios. Los conjuntos de videovigilancia han contribuido a robustecer y enriquecer ciertos casos polémicos en el sector sur de la entidad: tal es la situación del homicida Jonathan Cabbane (culpado de asesinar a su mamá y padrastro), quien ha sido captado por cámaras del C4 en un transporte, actuando de manera sospechosa. La Mesa de Estabilidad y Justicia refiere que con el paso de los años se hicieron los esfuerzos en tener dichos conjuntos, empero constantemente van a ser necesarios cada vez más pues la movilidad urbana es constante.
José Luis del Ángel Sosa, secretario ejecutivo de la Mesa de Estabilidad, entregó a conocer que estos conjuntos, sin ofrecer sitios exactos de localización, se han puesto en regiones donde se han podido reducir los incidentes delictivos. “Gracias a las gestiones que hemos llevado a cabo, vienen de Localidad Victoria a hacer las reparaciones al complejo de las unidades que muestran cualquier mal, claro de lo más sencillo”. En temas de equipo como de patrullas “siempre harán falta empero en este instante hay más que en otras ocasiones”.