como bien mencionan, el “hubiera” no existe, ya que los hechos allí permanecen y de esta forma fueron predestinados. Con el arranque de las primeras vacunas anti coronavirus en Tampico y Madero, con una organización horroroso por parte del personal federal de Confort, sumado a la carencia de empatía de una sección poblacional que acudió por su dosis a pesar de que no les tocaba. Y aquí es donde exponemos el célebre “hubiera”.
No entendemos en qué se basaron los burócratas gubernamental federal para escoger las 4 sedes en los dos municipios. No menciono que sean malos sitios. La Expo Tampico, la Unidep y el Tec de Madero, así como el Gimnasio de la UAT, poseen amplios espacios que tienen la posibilidad de ser aprovechados. No obstante, no anticipamos que dichos se verían rebasados por la alta demanda de la ciudadanía. Largas filas de bastante más de 5 kilómetros en la situación de los vehículos, con esperas de hasta 14 horas (se imaginan 14 horas para un maduro más grande sentado en un auto), en medio del calor, los zancudos, la descompensación, de aguantarse las triunfas de hacer sus necesidades que por su edad es complicado de mantener el control de.
Es un trato indignante. En la parte sur de Tamaulipas hay muchos sitios que se pudieron habilitar para apurar la vacunación, para desfogar aquellas terribles filas, empero no ha sido de esta forma. ¿Y si hubieran habilitado el bulevar costero de playa Miramar para hacer el drive thru de vacunación contra el coronavirus más enorme del estado? Así como la población acude a la playa en temporada alta, esperando largas horas para entrar al recorrido, de esta forma con dicha paciencia se ha podido haber facilitado este espacio, sin que perjudicara el tráfico ni a terceros, con una sola ingreso y salida”.
¿Y si además se hubiera facilitado el estadio Tamaulipas, donde se le pudieron situar malla sombra en las gradas y cancha? Este lugar tiene una capacidad para bastante más de 19 mil personas, de las cuales unicamente se utilizarían exactamente 2 mil 500 butacas, que podrían ser las dosis otorgadas? Otro proyecto de vacunación se ha podido armar con la ayuda de las escuelas.
Muchos planteles vacíos en dichos instantes que fueron desaprovechados. Las autoridades federales pudieron apoyarse con el Inegi para contar cuántos adultos más grandes alrededor de hay por colonia, y planteles, para que De esta forma cada uno acudiera a su escuela más cercana para aplicarse la vacuna, sin necesidad de dividir por iniciales. Sin embargo ya, el “hubiera” no existe y ya vimos las secuelas de una idealización de 2 días.